Hasta el 53% de las personas, especialmente aquellas que están seriamente interesadas en los deportes, se enfrentan a diversas patologías del sistema musculoesquelético. Las enfermedades se desarrollan por muchas razones, que incluyen lesiones importantes, fracturas, estrés excesivo en músculos y articulaciones.
Una de las enfermedades más comunes de las extremidades inferiores es el síndrome del tracto iliotibial, que se manifiesta en dolor y rigidez de movimientos. Es necesario tratar esta patología de manera compleja e inmediata, de lo contrario, no se excluyen las complicaciones graves y una operación de emergencia.
¿Qué es el síndrome del tracto iliotibial?
El síndrome del tracto iliotibial se entiende como una patología en la que existe un proceso inflamatorio o rotura de la fascia localizada en la superficie externa de los muslos. Esta enfermedad conduce a trastornos graves en la región de la cadera y complica la vida de una persona.
Los médicos se refieren a las características de la patología:
- síntomas pronunciados, caracterizados por dolor y dificultad para moverse;
- progresión rápida de la enfermedad;
- Requiere terapia compleja y a largo plazo.
Con un diagnóstico y tratamiento oportunos, el pronóstico es favorable.
Causas de la enfermedad
Básicamente, los deportistas profesionales se enfrentan al síndrome del tracto iliotibial, ya que son ellos quienes experimentan un aumento de cargas en las extremidades inferiores y un entrenamiento agotador regular.
Las principales razones que conducen a esta patología, los ortopedistas y terapeutas llaman:
- Estrés regular y excesivo en los músculos de las piernas.
En riesgo:
- corredores
Como señalaron los ortopedistas, el 67% de los corredores desarrollan el síndrome del tracto iliotibial, ya que corren sistemáticamente diferentes distancias y sobrecargan los músculos de la pantorrilla.
- ciclistas;
- jugadores de voleibol;
- jugadores de baloncesto;
- futbolistas y otros.
Nota: en general, están en riesgo todos los atletas que tienen una carga constante en sus extremidades inferiores durante el entrenamiento y la competencia.
- Las lesiones recibieron, en particular, distensiones musculares, roturas de tendones, dislocaciones.
- Trastornos congénitos del sistema musculoesquelético, por ejemplo:
- hallux valgus;
- pie plano;
- cojera.
En una persona con extremidades inferiores congénitas, al caminar, hay una carga desigual en los músculos y las articulaciones.
- No es un estilo de vida lo suficientemente activo.
En riesgo:
- pacientes postrados en cama;
- personas obesas;
- ciudadanos pasivos que ignoran las recomendaciones de caminar y practicar deportes con regularidad;
- personas obligadas a sentarse durante 8 a 10 horas, por ejemplo, trabajadores de oficina, cajeros y otros.
Debilidad muscular congénita o adquirida.
Cuando una persona tiene músculos débiles, bajo cualquier carga hay una mayor presión sobre las articulaciones de la rodilla, lo que a su vez puede conducir al desarrollo del síndrome del tracto iliotibial.
Los síntomas de la patología.
Cualquier persona que desarrolle una patología de este tipo se enfrenta a una serie de síntomas característicos.
Entre los más importantes:
Dolor en las articulaciones de la rodilla y las caderas.
En el 85% de los casos, el síndrome de dolor ocurre cuando:
- correr o caminar;
- realizar cualquier ejercicio de piernas;
- levantar y transportar pesos.
En una forma descuidada, el síndrome de dolor está presente incluso durante el descanso y el sueño.
- Rótulas crujientes, especialmente al despertar.
- Hinchazón en las rodillas y articulaciones de la cadera.
- Incapacidad para estirar completamente la pierna o caminar.
Cuanto más grave es el síndrome del tracto iliotibial, más pronunciados se vuelven los síntomas.
Métodos de diagnóstico
Es imposible diagnosticar de forma independiente el síndrome del tracto iliotibial, ya que la patología tiene síntomas similares al curso con otras enfermedades del sistema musculoesquelético. Solo los ortopedistas, junto con los terapeutas y neurólogos, pueden identificar con precisión la enfermedad y determinar en qué forma se encuentra.
Para hacer un diagnóstico, los médicos recurren a:
- Examen completo del paciente.
- Palpación de rótulas y articulaciones de la cadera.
- Sintiendo la fascia con las manos.
- Radiografías de las articulaciones de la rodilla y la cadera.
- Análisis de sangre y orina.
Básicamente, el paciente recibe una derivación para un análisis general de orina y sangre.
- Resonancia magnética y ecografía.
La resonancia magnética y la ecografía se utilizan cuando el médico duda del diagnóstico o se requiere para aclarar si existen trastornos concomitantes en el sistema musculoesquelético.
Además, para diagnosticar correctamente, los médicos necesitan una imagen completa del curso de la enfermedad. Los especialistas preguntan al paciente sobre la naturaleza del dolor y otros síntomas, la duración de su curso, cuándo la persona sintió molestias por primera vez, etc.
Solo la recopilación de toda la información le permite no cometer un error y determinar correctamente qué tipo de patología tiene una persona y, lo más importante, a qué tipo de tratamiento debe recurrir.
Tratamiento del síndrome del tracto iliotibial
Después del diagnóstico del síndrome del tracto iliotibial, se selecciona al paciente para el tratamiento, según:
- la gravedad de la patología identificada;
- la naturaleza del dolor;
- características de las rótulas y las articulaciones de la cadera;
- contraindicaciones;
- enfermedades existentes;
- grupo de edad del paciente.
En general, si el síndrome del tracto iliotibial no se encuentra en una forma descuidada y la persona no sufre un dolor insoportable y mal controlado, se prescribe un curso:
- Ungüentos, inyecciones y pastillas para aliviar el dolor.
- Medicamentos antiinflamatorios.
- Procedimientos fisioterapéuticos, por ejemplo, magnetoterapia, que mejora la circulación sanguínea, acelera el cartílago y la recuperación articular.
- Tratamiento con rayo láser.
En el síndrome del tracto iliotibial, el tratamiento con láser se usa cuando el paciente tiene dolor intenso e hinchazón en las rótulas.
- Comprime. Los médicos admiten que el paciente hace compresas de forma independiente y en casa.
Básicamente, se recomienda a estos pacientes:
- compresas saladas. Para hacer esto, disuelva 2-3 cucharadas de sal de mesa en un vaso de agua tibia. Luego humedezca un paño de felpa en la solución y aplíquelo en la zona deseada. Envuelva todo encima con film transparente y déjelo por 20 minutos.
- compresas de refresco. Están hechos por analogía, como los salados, solo 200 mililitros de agua requieren dos cucharaditas de bicarbonato de sodio.
La duración del tratamiento la prescriben los médicos, también establecen un régimen de ingesta de medicamentos y procedimientos específicos que son aceptables para el paciente.
Intervención quirúrgica
Para los pacientes con síndrome del tracto iliotibial diagnosticado, el tratamiento quirúrgico está indicado cuando:
- los procesos inflamatorios de la fascia no se eliminan con medicamentos potentes;
- el síndrome del dolor se ha vuelto permanente e insoportable;
- la persona no buscó ayuda médica durante mucho tiempo, como resultado de lo cual la patología se extendió a la última etapa.
Los médicos hasta la última lucha con la enfermedad e intentan arreglárselas con un método de tratamiento inoperable.
En una situación en la que el paciente está indicado para una operación, la persona es hospitalizada de forma rutinaria, después de lo cual:
- los médicos toman todas las pruebas requeridas;
- repetir la ecografía y la resonancia magnética de las articulaciones de la rodilla y la cadera;
- nombrar el día de la operación.
Durante la operación, se quita la bolsa o se realiza el plástico del tracto iliotibial.
Fisioterapia
Es imposible que las personas con síndrome del tracto iliotibial diagnosticado se recuperen por completo sin ejercicios terapéuticos.
Ella es nombrada por ortopedistas y solo después:
- pasar un curso de procedimientos de fisioterapia;
- el final de tomar todas las tabletas y ungüentos recetados;
- Eliminación significativa o completa de la hinchazón y el dolor.
Básicamente, todos los ejercicios gimnásticos para esta enfermedad tienen como objetivo fortalecer los músculos de la cadera y desarrollar las articulaciones de la rodilla.
En general, a los pacientes se les prescribe:
1. Apoya las sentadillas.
Una persona debe:
- párese derecho, de espaldas a la pared;
- separe los pies a la altura de los hombros;
- desciende suavemente hasta la línea de la rodilla;
- fije su cuerpo durante 2 a 3 segundos en esta posición;
- tomar suavemente la posición inicial.
2. Saltar la cuerda.
3. Columpios cruzados.
Necesario:
- tomar una silla con respaldo;
- párese en la silla con la cara y las manos agarradas al respaldo;
- arranca tu pierna derecha del suelo a una altura de 25 a 30 centímetros;
- Mueva la pierna primero hacia adelante, luego hacia atrás y luego en diferentes direcciones.
Los columpios se realizan 15 veces en cada pierna.
Rehabilitación del síndrome del tracto iliotibial.
Después de someterse a un curso de tratamiento, una persona necesita rehabilitación del síndrome del tracto iliotibial, que incluye:
- Limitar la actividad física en las articulaciones de la rodilla y la cadera.
- Negarse a entrenar durante 30 a 60 días.
En casos aislados, los médicos pueden prohibir los deportes en absoluto.
- Usar solo zapatos ortopédicos con plantillas especiales.
- Realización regular de ejercicios gimnásticos especiales destinados a desarrollar los músculos de los muslos.
El médico tratante prescribe un curso de rehabilitación detallado.
Consecuencias y posibles complicaciones
El síndrome del tracto iliotibial es una patología bastante grave que puede tener varias consecuencias.
Entre los principales ortopedistas se encuentran:
- Crujido constante de las rótulas al caminar y al despertar.
- Dolor recurrente en las articulaciones de la cadera.
En el 75% de los pacientes, dicho dolor se produce durante el tiempo, especialmente cuando hay una ola de frío, después de enfermedades infecciosas y también cuando cambia el clima.
- Cojera.
La cojera se observa solo en el 2% de los casos y si el tratamiento complejo no se inició a tiempo o la operación no tuvo éxito.
Además, no tomar el tratamiento a tiempo puede dar lugar a una serie de complicaciones:
- debilidad muscular en las articulaciones de la rodilla y la cadera;
- la incapacidad de seguir caminando una distancia larga sin molestias o dolor en las extremidades inferiores;
- Hinchazón periódica de las rótulas.
Las complicaciones y consecuencias negativas se reducirán a cero si el tratamiento se inicia a tiempo.
Medidas preventivas
Para reducir el riesgo de desarrollar el síndrome del tracto iliotibial, los ortopedistas recomiendan medidas preventivas.
Entre los más importantes:
- Actividad física moderada en las articulaciones de rodilla y cadera.
- Calienta antes del entrenamiento principal.
Durante el calentamiento, se recomienda poner gran énfasis en calentar los músculos de la pantorrilla.
- Nunca levante objetos pesados de manera brusca, especialmente desde una posición sentada.
- Al realizar cualquier ejercicio deportivo, observe la técnica correcta para su implementación.
- Si tiene pies planos, entrene solo con zapatos especiales con plantillas ortopédicas.
- Nunca vaya a una actividad deportiva si se lesionó una pierna el día anterior o si nota molestias en las extremidades inferiores.
- Siempre use y haga sus entrenamientos con zapatos cómodos que no presionen demasiado la pierna y proporcionen una carga uniforme en el pie.
- Póngase en contacto con un ortopedista inmediatamente tan pronto como aparezcan los primeros síntomas de dolor en las articulaciones de la rodilla y la cadera.
También es importante aumentar siempre la actividad física de forma gradual y el ejercicio bajo la supervisión de especialistas. El síndrome del tracto iliotibial es una afección grave que a menudo se presenta en atletas, especialmente corredores y ciclistas.
Esta enfermedad se desarrolla rápidamente, acompañada de dolor, crujidos en las rodillas e incapacidad para moverse por completo. El tratamiento se selecciona después de un examen completo, y solo se prescribe una intervención quirúrgica en formas complejas y descuidadas.
Blitz - consejos:
- comenzar la terapia solo cuando los médicos diagnosticaron una patología y seleccionaron un tratamiento;
- es importante comprender que si se indica una operación, no debe rechazarla, de lo contrario puede quedar discapacitado;
- Vale la pena comenzar y terminar el entrenamiento con un simple calentamiento.